Diseño de páginas web
Hablar de desarrollo web es hablar de una de las herramientas tecnológicas con mayor relevancia en la actualidad. Gracias a que internet es un recurso primordial a la hora de crear negocios eficaces e inteligentes, las marcas consiguen la gran parte de sus objetivos planteados haciendo uso de él, lo cual nos permite afirmar que el desarrollo web se ha impulsado gracias a la evolución y a la inclusión de las tecnologías como parte imprescindible de nuestro día a día.
Ahora bien, el desarrollo web significa crear y mantener sitios web en Internet. Es una actividad que consigue que una página web tenga una buena apariencia, un buen desempeño y un funcionamiento óptimo, que garantice la mejor experiencia de un usuario. Las empresas demandan esta herramienta porque consigue expandir el contenido online de una marca.
Todo esto se logra teniendo en cuenta varias etapas, las cuales al identificarlas entendemos la importancia del desarrollo web en el mundo digital.
- Briefing.
En esta etapa se definirán elementos importantes por parte del cliente, los cuales marcarán el rumbo de lo que se va a realizar; en este punto se analiza a quién se quiere dirigir, cuál es el público, presupuesto, alcance, entre otros aspectos claves. Una vez planteado esto, el desarrollador o la agencia encargada tendrá que analizar cada uno de estos aspectos para guiar y aconsejar a la marca sobre cómo se verá mejor. En todo momento se debe tener presente tanto el o los objetivos, como el presupuesto del que se parte.
- Planificación.
Una vez establecido el objetivo y el alcance que se espera obtener inicia el proceso de planificación de las bases sobre las que se va a trabajar. En esta etapa se aportan distintas ideas que sean capaces de solucionar y conseguir los objetivos marcados. Se planificará la estrategia de contenidos a seguir, así como la arquitectura de la información. Se realizarán diferentes prototipos sobre la estructura del proyecto web, que deberán de ser probados, evaluados y aprobados por el cliente.
- Diseño web.
Cuando el cliente aprueba el prototipo de la web se empezarán a crear los elementos multimedia y los elementos gráficos. Suelen llevarse a cabo tests de usabilidad con prototipos navegables capaces de validar que la experiencia de usuario que se va a ofrecer es la adecuada para la audiencia a la que la marca se quiere dirigir.
- Desarrollo web.
Aquí entramos específicamente en el desarrollo web, es decir, llevar a la realidad las ideas que se habían plasmado en las etapas anteriores, es decir, implementar todas las funcionalidades que van a hacer que el proyecto funcione. En este punto se eligen los lenguajes de programación idóneos, se desarrolla el front end y el Backend, las bases de datos, se optimiza el rendimiento y la seguridad de la página, se confirma el cumplimiento de todos los estándares de accesibilidad web, etc. Los especialistas suelen hacer uso de metodologías de desarrollo ágiles, para evitar provocar cualquier error.
- Lanzamiento.
Cuando ha finalizado el proceso de desarrollo web se procede a su lanzamiento. Es la publicación definitiva del proyecto en el servidor de la empresa. Para que esto suceda, el cliente o la persona que se encargará de la administración de sitio ha tenido que aprender a utilizar el software desarrollado. Asimismo, se insertan herramientas de analítica web que informarán en el futuro de si se están cumpliendo los objetivos del negocio.
- Mantenimiento.
El proceso de desarrollo de páginas web no termina ahí. Es necesario realizar mantenimiento periódico donde se realizarán actualizaciones y mejoras continuas durante el tiempo que se quiera hacer uso de la web. Si el negocio va creciendo, se desarrollarán nuevas funcionalidades. La fase de mantenimiento también engloba el soporte técnico al cliente, fundamental para solventar cualquier posible error que se haya detectado.
